Twitter lidera la nueva era de las burbujas "puntocom"

Por Raúl Masa Más artículos de este autor

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Herramienta de microblogging, red social, tan volátil es Twitter que su definición exacta aún está por definirse, igual que su valor real en el mercado.

Más de 4.000 millones de euros, otros lo sitúan más cerca de los 5.000, la cuestión es que nadie sabe lo que vale Twitter, porque ellos mismos, quienes lo crearon, tampoco lo saben. El caso es que, pese a quien le pese, nos encontramos en una nueva burbuja de las ‘puntocom’, en este caso de las redes sociales. Luego nadie se hará cargo, todos lloraremos y los pequeños inversores serán de nuevo los grandes perjudicados.

Cuando se habla de la burbuja de las ‘puntocom’ con las redes sociales como referente, todos se echan las manos a la cabeza y se rasgan las vestiduras. No puede ser. Facebook tiene más de 600 millones de usuarios, Twitter otros tantos millones, y así las principales redes sociales. Pero la cuestión es, ¿qué significan o suponen esos millones de usuarios?, ¿ahora resulta que las “masas” son fieles y siempre van a usar Facebook o Twitter?

Sería una locura dudar a día de hoy de Twitter o Facebook y todas las prestaciones que ofrecen, pero habría que ir más allá en su modelo de negocio y ver el valor añadido que aportan, o mejor dicho, qué ofrecen que otra empresa no haga. Por ejemplo, una empresa energética cuenta con sus infraestructuras, y lo genera como valor. Una operadora de telefonía más de lo mismo. La gente siempre necesitará de esa, y no otra, para tener esos servicios.

¿Pero una red social es tan necesaria?, ¿y si mañana aparecen “Luister” y “Tumbuk”? Con servicio mejorados y prestaciones a las que los usuarios se adaptan mejor. ¿Dónde quedarán los 4.000 millones de Twitter?

El que niegue que se está produciendo una nueva burbuja ‘puntocom’, niega la máxima de cómo funciona este nuevo capitalismo yupi anclado en las formas que en el inicio de milenio ya llevaron a la quiebra a cientos de compañías de Internet. Pero si nadie lo quiere ver, ¡¡ qué viva Twitter!!